Despedida.

Esta dolorosa noche, no vengo a esciribir poesia. Hoy, con un vacío terrible en el pecho, y los ojos inundados de lágrimas, vengo a despedirme de ti. 
Sigo intentando escribirte sin llorar. Pero con esto, la intencion no es lo que cuenta. 
Hoy, sigo deseando que vuelvas y cuando te vea, no se si darte una hostia o ahogarte a abrazos. A día de hoy, dueles más que nunca. Aun no asimilo que no vayas a volver. 
Hace unos dias, alguien me dijo "escribele una carta de despedida, y dile todo lo que se pierde." Y sinceramente, no te pierdes nada. O al menos, ahora mismo, ya no hay nada en esta vida que merezca la pena. Porque te aseguro, que a esto no se le llama vida. 
Y, dicho esto, jamás me voy a poder despedir de ti. 

Te amo. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Contigo.

María.

Jodida.